Varios son los temas que destacaron en los últimos 8 días, de manera preponederante los electorales, el caso de Wikileaks y las filtraciones sobre el FBI y los migrantes, que vaticinamos la semana pasada tendría muchas menciones, sí alcanzó un cuarto lugar en nuestra lista, buen lugar pero no de los primeros.
Otros casos en la semana, pues todavía del del llamado JJ y la agresión a Salvador Cabañas. Y un tema que afortunadamente ha bajado esta semana, al menos en medios, es el de la violencia del crimen organizado, en particular del narcotráfico.
Destacó la semana pasada en noticieros y programas de opinión la figura de un personaje ya desaparecido. Me refiero a Samuel Ruiz García, obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, y mediador entre el gobierno y el movimiento indígena rebelde en Chiapas. De este personaje no se había escuchado hablar mucho en los últimos años, si acaso por ahí de 2008 cuando se integró una comisión de intermediación con el llamado Ejército Popular Revolucionario o EPR, y de ahí a la fecha prácticamente nada, hasta el día de su Deceso. Sobre la persona de este controvertido obispo se han vertido muchas opiniones, y en medios se refleja una imagen bastante dividida de su actuación en el conflicto de Chiapas: Mientras unos los veían como instigador del mismo, muchos otros como parte de la solución. De cualquier forma hoy descansa en paz un personaje indispensable para entender el conflicto armado que marcó la última parte del siglo XX en México.
Elecciones, elecciones y más elecciones. Esta semana estuvo marcada por una acumulación importante de horas y horas al aire relativas a los procesos electorales de este año, y en particular al del estado de Guerrero, que acumuló más del doble de notas que de los temas mas cercanos, como lo fue el foro económico mundial en Davós, Suiza o el caso del cantante Kalimba, que afortunadamente ya no dio mucho de que hablar después de su liberación. Sobre las elecciones en guerrero se creó una importante expectativa, y porque no decirlo un cierto morbo mediático ante los posibles conflictos electorales que se anunciaban por todos lados. La llamada “guerra sucia” de ambos bandos llegó a su cúlmen la víspera de la elección, y paradógicamente al término de la jornada de votaciones se desactivaron cualquier intento por violentar los procesos, lo que generó lo que podríamos llamar un final anticlimático. No dejan buen sabor del proceso electoral en guerrero, con la violencia previa, las declinaciones y las acusaciones. Pero al menos podemos llegar a la mañana del lunes sin una escalada de violencia electoral.
No hay comentarios:
Publicar un comentario