Las noticias de vacaciones

En la semana que corre del 8 al 15 de este mes de diciembre, los contenidos informativos comienzan a disminuir en intensidad. En estos días atestiguamos la lamentable conclusión del caso del secuestro de Silvia Vargas Escalera,  que junto con el proceso electoral del siguiente año han sido los casos más referidos por la radio y televisión mexicanas. En cuanto a instituciones, los partidos políticos y los grupos legislativos se pelean los primeros lugares de mención, dando paso también a una institución que ya no con mucha frecuencia, y tal vez debido a estas épocas, ha tenido algún nivel de menciones: me refiero a la iglesia católica.

Con las ultimas semanas del año, llega al igual que la navidad y año nuevo, un fenómeno interesante en los medios de comunicación en México. Los días de fiesta parecen serlo para todos, y entonces los políticos son menos rijosos, los criminales menos descarados, los anarquistas más tolerantes, y los ultraderechistas más conciliadores.  Y no, no se trata del milagro de la navidad, sino que simplemente los medios de comunicación reducen en buena medida lo que podríamos llamar su “tren de producción”. Parte de la plantilla de reporteros toma vacaciones, los conductores le dan la oportunidad a sus suplentes, y políticos que por lo regular no son considerados para una entrevista, por haber voceros de más peso, logran tener unos ansiados minutos al aire, aunque pocos los escuchen o vean, ya que al igual que los medios, las audiencias se van también de vacaciones, o al menos toman unos días de asueto.  En estos días me gusta imaginar algún tipo de “caricatura mental” al respecto,  como a dos adversarios políticos hospedados en cuartos contiguos del hotel,  o incluso al secuestrador y al jefe policíaco tomando el sol en la playa, uno al lado del otro sin reconocerse.

Todos necesitamos vacaciones, tanto para descansar el cuerpo, como el espíritu. La sociedad y los medios también en plural puede sacar ventaja de días menos complicados, de situaciones menos álgidas, para procesar ideas, conclusiones y alternativas a situaciones prevalecientes, probar por ejemplo nuevos enfoques de información; más y mejores reportajes y menos noticias de última hora; en resumen, menos ruido y más nueces.

A falta de noticias, o al menos ante la disminución del flujo informativo, los espacios noticiosos y de opinión de la radio y televisión principalmente, recurren en estos días a información proveniente de las agencias nacionales e internacionales, a la transmisión o retransmisión de reportajes, y a los siempre infaltables resúmenes anuales, algunos de ellos muy buenos. Escucharemos y veremos en estos días recopilaciones de lo más importante del año, reportajes interesantes que nunca encontraron espacio para su transmisión en los meses anteriores, y tal vez, los primeros minutos al aire de nuevos talentos de la conducción.

Nosotros no queremos quedarnos atrás; por lo que las próximas dos entregas de este comentario, las que restan para terminar el mes,  las dedicaremos a hacer una recopilación de lo más relevante en materia de radio y televisión mexicanas durante este agitado año de 2008.